”Ohne Musik wäre das Leben ein Irrtum”
(Nietzsche)
Probablemente para muchos de nosotros la vida carecería de sentido si no existiera la música, o al menos, sería muy diferente al modo en el que la percibimos. Y es que tal y como afirmó Nietzsche, “sin música la vida sería un error”.
Pero ¿por qué deberíamos escuchar música alemana mientras aprendemos el idioma?
Resulta indiscutible el poder de la música en el campo de la enseñanza. Numerosos estudios científicos en el campo de la neurociencia han puesto de manifiesto la importancia que tiene el material con el que aprendemos. Factores como el captar nuestra atención, generar emoción y salir de la monotonía hacen posible que ese contenido pueda ser realmente aprendido. Lo podríamos ejemplificar de la siguiente manera:
Emoción→ Motivación→ Aprendizaje
Las canciones nos motivan, nos inspiran y nos emocionan. Además nos sirven para desconectar de las rutinas de estudio. Gracias a la música podemos conectar con los pensamientos y el alma del cantante, y a su vez, aprendemos numerosas estructuras, vocabulario y la correcta pronunciación de las palabras. Es como si, sin darnos cuenta, nos hiciera conectar con una esfera más elevada, la artística, capaz de despertar nuestro interés por ese apasionante idioma que estamos aprendiendo, el alemán. Cuando fusionamos el idioma y la música, el resultado que obtenemos es mágico, pues de eso precisamente está compuesta la música: de magia. Tanto las canciones como la lengua comparten muchas características en común: la melodía, el ritmo, la entonación y el significado. Es un recurso valiosísimo que nos anima a seguir aprendiendo con ilusión y hace posible que nos divirtamos mientras ampliamos nuestro conocimiento.
Y tú, ¿a qué esperas para indagar en el maravilloso mundo de la música alemana?
Maribel Piña Reyes
Profesora de alemán en EFEMálaga/ ISBA Campus Málaga
